EN alta mar olvide tu nombre.

Y fue así de fácil que me senté a esperarte una tarde, mientras el amor se alejaba con el ocaso del sol.
No siento nada ya estoy amortiguado de tanto descaro, y que importa lo que sienta si igual no tendré tu presencia, vete¡, ¡vete ya ¡ sigue tu rumbo como quieras llevarlo, pero ya no me ganas más daño.

Saldré en julio, tomare un barco para conocer tierras extrañas y espero quedarme por ahí, sino es con una vida nueva será con mi muerte, porque no quiero volver a ver tu rostro en la oscuridad de la noche encerrando un misterio que me encanta.

En la tranquilidad de la alta mar, me inspirare para poderte olvidar, si me mareo por el vaivén de las olas preferiré la muerte para poderte olvidar, cuando llegue a un puerto sembrare en mi primer paso la huella de tu olvido, caminare hacia el oeste esperando alejarme de ti, aunque el subconsciente me dice que siga por ese camino que volveré al este de tu presencia.

Ya nada queda, ningún recuerdo he borrado todo lo amargo de ese tiempo, ninguna experiencia, ninguna anécdota, ya no recuerdo ni si quiera tu nombre pero mi corazón aun sigue sangrando por una herida de amor.